Luego, en parejas, montaron sus propias tiendas y participaron en una simulación de compra y venta de productos, reforzando habilidades de comunicación y matemáticas básicas en un ambiente divertido y colaborativo. ¡Se lo pasaron genial y aprendieron mucho! Esta actividad práctica reafirma nuestro compromiso con una educación inclusiva y enriquecedora para todos así como el consumo de alimentos saludables y consumo responsable de los mismos. Os animamos a que realicéis vuestro mercado propio